El pasado viernes 3 de noviembre se llevó a cabo una nueva edición de “La Noche de los Museos 2023”. Bajo el lema “Ciudad y democracia”, y considerando los 450 años de la ciudad de Córdoba y los 40 años del retorno a la democracia en nuestro país, miles de personas de todas las edades, se sumaron a las distintas actividades culturales y propuestas artísticas.
Previo a la apertura de cada uno de los museos, prevista para las 20hs, se observó una multitud que aguardaba -expectante como todos los años- recorrer las diversas propuestas que se ofrecen en la ya tradicional Noche de los Museos.
Las calles mostraron la ilusión que se vivía en la ciudad. Se tornaba imposible caminarlas y no sentirse parte de ellas, de algo más grande, ceremonial y colectivo, que alojaba y volvía hogar a los espacios públicos de Córdoba.
Entre estas largas filas que precedían a cada uno de los museos, estaban quienes querían ingresar al Rectorado Histórico de la UNC que, con múltiples propuestas, esperaba a sus visitantes con ansias. Público cordobés, turistas de otras partes del país y también del mundo, visitaron cada sala y participaron de las distintas propuestas.
Donde todo comenzó
El sector del patio, en el centro del Museo Histórico, fue el lugar donde la mayoría del público se congregó durante toda la noche. Allí, bajo la imponente estatua de Fray Fernando Trejo Y Sanabria, miles de personas hicieron fila para vestirse con la clásica toga de los estudiantes de la época colonial y tomarse una foto para registrar el momento, en la actividad llamada “Donde todo Comenzó”.
Familias, grupos de amigos y parejas, se acercaban y aguardaban ansiosos su turno para generar un recuerdo único junto a sus personas queridas. A ellos, los esperaban distintos practicantes voluntarios y miembros del Museo Histórico para ayudarlos y asistirlos en la preparación de la gran escena.
El bosque en tus manos
También se pudo apreciar, desde la apertura hasta la 01:00 hs, la actividad “El bosque en tus manos”, donde los y las visitantes pudieron adoptar el oficio de dibujante inspirándose en los libros de la biblioteca del museo, y coloreando una hoja propia o una gran viñeta de manera colaborativa.
Se los esperó con grandes mesas, repletas de plantas decorativas y todos los colores imaginables, dispuestos en lápices y fibras que pudiesen necesitar para recrear aquellas grandes obras creativas.
La actividad se vivió como un encuentro tanto personal como compartido con afectos, donde la concentración y el disfrute se sintieron en el ambiente por momentos silencioso y por momentos repleto de risas y charlas amistosas.
El mundo en un pañuelo
Además, en tres horarios diferentes, se pudo ser parte de la propuesta “El mundo en un pañuelo” donde, en medio de la oscuridad y únicamente guiados por linternas, se navegó junto a una exploradora y guía, a través de la historia observando los mapas antiguos del museo.
Aquí, también, la participación fue muy concurrida y variada, público de todas la edades se dispuso a descubrir con sus linternas los misterios que la oscuridad escondía.
Una noche de fantasmas
El Museo Histórico de la Facultad de Derecho fue protagonista con su noche de fantasmas, una representación teatral conformada por personajes que “viven todo el año escondidos en los claustros de la Manzana Jesuítica y que salen solo una noche a encontrarse con el público”.
En palabras Gustavo Aliaga, quien en esta oportunidad representó al antiguo Rector Manuel Lucero, “la Noche de los Museos es algo fantástico, es una noche en donde la gente entra, se encuentra con este espacio que es nuestro, que es de todos y tratamos de que se sientan cómodos, que conozcan, es un paseo histórico” y destacó que esta edición le encantó por la variedad de propuestas.
El Museo de la Facultad de Odontología y el Museo Científico Tecnológico también dijeron presente
Una gran boca, intervención artística de los voluntarios de la Facultad de Odontología, invitaba a pasar a las familias, a los más pequeños, a sumarse a distintas actividades educativas y lúdicas sobre el cuidado de la salud bucal.
Por su parte, el Museo Científico Tecnológico (Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales) deslumbró en las calles Obispo Trejo y Caseros. Piezas únicas, representativas del museo que son parte de la historia de los motores de aviación y de automóviles de diferentes décadas fueron apreciadas por el público que recorría el exterior del Rectorado.
De esta manera, el éxito de la Noche de los Museos 2023, se reflejó no solo en la gran afluencia de público, que no paró de ingresar durante toda la noche, sino, en el testimonio de cada visitante, vecino o turista, y de las personas que colaboraron en el evento.
Créditos
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Redacción: Verónica Ferreyra y Catalina Lastra (Practicantes de la Facultad de Ciencias de la Comunicación para el Museo Histórico) y Mercedes Benítez Miranda (Practicante de la Facultad de Ciencias de la Comunicación para el Programa de Museos)
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Video: Verónica Ferreyra y Catalina Lastra
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Fotografías: Comunicación Institucional UNC